Al igual que tú (y que la inmensa mayoría de los mortales) yo también me he preguntado muchas veces cosas del tipo ¿Qué es la felicidad? ¿Existe? ¿Es una utopía? ¿Es posible ser feliz todo el tiempo?
Personalmente creo que nos obsesionamos demasiado con la felicidad, con intentar estar contentos todos el rato, con solo mostrar nuestra mejor cara.
Creemos que la felicidad es la meta y nos olvidamos de que solo podemos encontrarla en el camino.
Así que por ello y porque la definición de la RAE sobre qué es la felicidad deja mucho que desear he decidido juntar a 25 personas con sus propias definiciones para que nos inspiren a reflexionar sobre este tema.
En mi caso en concreto esa felicidad está totalmente asociada a mi valor principal, que es la libertad. Por tanto felicidad es para mí poder hacer lo que quiero, cuando quiero y disfrutar de las personas a las que quiero
En mi opinión la felicidad es algo tan subjetivo que es difícil de encerrar en palabras. De hecho creo que se utiliza de forma excesiva como reclamo de un ideal muchas veces difícil de alcanzar y muchas personas se obsesionan sin reflexionar qué es para ellas ser felices.
En mi opinión la felicidad se construye a través de esas cosas que te permiten SER en esencia, aquellas cosas que te llevan a tu equilibrio y te permiten experimentar paz interior.
Para mí la felicidad es tomarme cada situación que sucede en la vida sin drama, tal como viene, sin necesidad de caer en juicios.
Felicidad es no entrar en el bucle del conflicto suceda lo que suceda. Observar lo que llega, observar cómo me siento, cómo afecta sin juzgar y sin juzgarme. Saber que en cada momento tengo una nueva oportunidad para escoger cómo me siento.
De esta forma no me importa lo que suceda ya que eso no alterará mi estado de paz y por ende de felicidad.
Evidentemente no siempre lo consigo pero cuando lo hago me siento expansiva y plena, y esa plenitud hace que me sienta feliz.
Ser feliz es una decisión ¿Te atreves a tomarla?
Para mí la felicidad es una actitud, un estado mental y emocional ante la vida. Algunos consideran la felicidad como meta a la que llegar. Otros, como camino de superación y crecimiento. ¿Quién tiene razón? ¡Todos! Porque en realidad la felicidad es algo tan íntimo, tan particular, tan profundo, que definirlo para todos es imposible.
Según el Coaching Estratégico, la felicidad se produce cuando nuestras expectativas y la realidad coinciden. Es decir: cuando tengo todo aquello que deseo. ¿Pero acaso hay alguien que lo tenga todo?
Tal vez sólo aquellos que han comenzado el camino espiritual y se han dado cuenta de que ya lo tienen todo para ser felices, que la vida en sí es felicidad pura, porque es un milagro estar vivos, tener el privilegio de respirar, disfrutar, sentir...
La felicidad, para mí, es la ausencia del miedo, es vivir la vida en plenitud, sin miedo a exponernos o incluso a sufrir. Y también la felicidad es llevar una vida con sentido, sentir que puedo aportar valor a este mundo con mi propio crecimiento y mi propia felicidad.
Me parece un buen comienzo explicar que, en mi lenguaje habitual, he sustituido la palabra “felicidad” por “plenitud”, ya que este último concepto se acerca mucho más a lo que yo entiendo como camino y propósito de vida.
¿Y qué es la plenitud para mí? Este fabuloso estado se alcanza cuando lo que decimos, pensamos y hacemos se conjugan en perfecta armonía.
Cuando nuestros actos reflejan nuestros valores, prioridades, convicciones, creencias y sentimientos es como si todo nuestro universo se conjugase en una perfecta ecuación que nos proporciona un bienestar infinito que bien puede prolongarse unos minutos o de forma más prolongada en el tiempo.
En mi caso, los pequeños grandes detalles de la vida son lo que me permiten alcanzar con mucha facilidad esta sensación.
Disfrutar de una película junto a mis primas pequeñas, un abrazo inesperado nacido desde el corazón, una sobremesa agradable en buena compañía, un paseo en silencio con alguien con quien no necesitas comunicarte a través de palabras, un viaje desorganizado repleto de sorpresas, una canción mágica en el instante preciso… son algunas de esas pequeñas grandes cositas de la vida que nos recuerdan que no es necesario perseguir la felicidad constantemente.
Tan sólo necesitamos darnos permiso para disfrutar de lo que tenemos delante de nuestras narices.
Describir la felicidad como un estado permanente sería ponernos un reto imposible de conseguir. Por eso para mi la felicidad son momentos. Instantes. La felicidad está en las pequeñas cosas. Ese abrazo de tus hijos, o ese primer beso de la persona que te gusta. El olor a tierra mojada. Ir a cenar a tu restaurante favorito. Tener un rato al día para doodlear. Ver una estrella fugaz. Que alguien te ayude sin pedirlo.
Cada día, intento atesorar uno de estos momentos en mi mente, guardarlos en un rinconcito. Si quiero que algo permanezca durante mucho tiempo, porque me ha hecho inmensamente feliz, una de las formas que tengo para estar más tiempo en esa sensación, es hacer un dibujo sobre ello.
Practico el doodling como técnica para conservar recuerdos, para saborearlos, como quien se come un bombón. Dibujar es como comer chocolate, pero sin calorias.
Seguramente muchos de esos pequeños momentos, pasan desapercibidos, por eso al final del día, es mi momento para reflexionar sobre ello. Elijo el momento en el que quiero permanecer mas tiempo y lo elaboro a través del dibujo, como si escribiera sobre ello. El doodling no es un dibujo elaborado, sólo es garabatear, dibujar un patrón, pero me relaja y me ayuda a estar en el presente y a agradecer todos esos pequeños momentos que me han hecho feliz.
“La felicidad es un estado interior maravilloso que suelo sentir en un instante y de forma prolongada en el tiempo, dependiendo de la experiencia que voy viviendo cada día.
Este estado interior de felicidad, lo siento cuando gozo de un paseo por la naturaleza y también cuando mis sentidos disfrutan de un amanecer y una música que llega a mi corazón.
Siento estados intensos de felicidad cuando disfruto de momentos de amor, risas y diversión en compañía de mi pareja, familiares y amistades de confianza.
La felicidad para mí es tener salud y sentirme bien conmigo misma. Sentirme satisfecha con mis propósitos vitales. También cuando aprendo algo nuevo cada día y sonrío por estar aquí.
Finalmente, la felicidad está presente en mi vida cuando trabajo junto con otras personas para construir un mundo mejor. Es intensa cuando siento que las personas que me rodean y con las que trabajo, superan obstáculos y mejoran sus vidas.
Es una energía poderosa que llamo amor y que podemos sentir en cualquier momento y es todavía más intensa cuando la compartimos con los demás.”
La felicidad es absolutamente subjetiva, nadie es más feliz que nadie, ni a todos nos produce felicidad los mismos hechos.
Siempre he pensado que la felicidad consiste en la actitud que tienes frente a la vida, que no hay que buscarla, sino tener la capacidad de valorar y disfrutar de las pequeñas cosas y momentos que en el presente y en nuestro día a día nos hacen experimentar esa sensación de satisfacción o bienestar cuando alcanzamos nuestras metas o hacemos aquellas actividades que más nos gustan por el motivo que sea. No por ello no vamos a soñar grande, pero hay que saber ver más allá, porque la felicidad se compone de momentos y experiencias, no de cosas por coleccionar.
Lo más valioso de la vida no es que tenemos, sino a quien tenemos, y ellos tienen que ser parte de esos momentos. Yo valoro cada momento feliz con mi familia, humana y peluda, esa que me hace liberar oxitocina y endorfinas, con una mirada, un gesto o una trastada, sé que sin ellos mi día a día no sería igual. La felicidad nunca llegará a aquellos que no aprecien lo que ya tienen.
¿Qué es la felicidad?
Cuando me planteas esta pregunta se me vienen a la cabeza aquellas discusiones de carrera donde todo constructor psicológico parece tener un sin fin de definiciones en función del paradigma o incluso del estudioso en cuestión que la plantea.
A lo largo de todos estos años he decidido crear mi propia deficinición y a día de hoy puedo decir que la felicidad es una responsabilidad muy grande y sobre todo personal.
Y lo es porque si te fijas, todo lo que haces en la vida lo haces para promover en ti un estado de bienestar y plenitud, o así debería ser, y si esto es así no es correcto ni por supuesto justo que cargues a otra persona con ese enorme peso.
Los que me conocen saben que siempre repito la misma frase, incluso de forma machacona: - Vive tu vida desde el lado positivo ¿Porqué? Porque en este lado está el optimismo, está la conciencia de vivir el presente con intensidad, esta la asertividad, está la actitud y el deseo de superación y está eso que a todos nos suena un poco a chino: relativizar los problemas.
Ojo: digo relativizar, no negar. Negar implica no ser consciente y vivir en un estado de irresponsabilidad personal. ¿entiendes ahora porqué es una responsabilidad tan grande, incluso difícil en ocasiones?
La felicidad quizás sea la mayor quimera que haya vivido el ser humano a lo largo de su historia. Todo el mundo oye hablar de ella, todo el mundo la codicia, pero pocos llegan realmente experimentarla de manera substancial.
Yo creo que la felicidad es un término que en general se malinterpreta en nuestra sociedad, porque solemos ligarlo a determinados objetos y/o circunstancias. Desde dicha perspectiva, la felicidad se presenta como una emoción comparable al júbilo, la alegría o la satisfacción profundas, algo en sí muy agradable, pero que viene siempre con fecha de caducidad.
Por otro lado, podemos abordar la felicidad como un estado de ser, no ya como una emoción, y desde este punto de vista vemos que pese a las circunstancias externas que puedan presentarse podemos ser felices (o ‘estar en paz’) en todo momento.
Creo que cualquier persona querría ser feliz para siempre, y la buena noticia es que cualquiera puede llegar a ese lugar, pero para hacerlo debemos primero identificar todo aquello que no necesitamos para ser felices, y llegar al fondo de nuestro corazón para descubrir que la felicidad siempre había estado ahí, sólo que nosotros no la habíamos descubierto porque estábamos distraídos con todo lo demás.
Para mi la felicidad es sentirme realizada cada día. Saber que estoy dando lo mejor de mí y levantarme cada día con la ilusión de hacer lo que me gusta y de ayudar a los demás en el proceso.
Y es que esta sociedad nos incita a buscar la felicidad fuera, y caemos en el error de pensar que seremos felices cuando consigamos esto o lo otro, cuando alcancemos esa meta deseada, o peor aun, cuando nos compremos esa casa o ese coche.
Soy fan numero uno de ponerse retos, metas y objetivos, pero la felicidad no debe estar en conseguirlos sino en el propio proceso de evolución que nos lleva a mejorar como personas.
Una de las cosas que hemos aprendiendo en nuestros viajes, sobre todo en países menos desarrollados como puede ser Tailandia, es que el concepto de felicidad es relativo. Ves a gente sin prácticamente nada pero que sonríen, son felices y no se quejan tanto.
Dejar de pensar en lo que te falta y aprender a estar agradecidos con lo que tenemos es el primer paso para darnos cuenta de que no necesitamos más para ser felices aquí y ahora, porque está dentro de nosotros.
Todos llevamos dos tipos de vidas, la que tenemos y la que realmente nos gustaría tener. Es como si tuviéramos una especie de doble personalidad: nuestro “yo” viviente, el que vive el día a día, sufre, camina, piensa y siente, y nuestro “yo” imaginario, esa forma de vida que tenemos en el fondo de nuestro corazón y que realmente nos gustaría alcanzar. Es como nuestro “yo” ideal, el “yo” perfecto, el que lo tiene todo y que por desgracia nunca sale de nuestro mundo de sueños.
Cuando unimos esos dos “yos” en uno solo, es decir, hacemos que la vida que tenemos y la que en realidad nos gustaría tener se junten, nace en tu mente y en tu corazón algo llamado felicidad.
Somos felices cuando realmente nos centramos y esforzamos en ser como nos gustaría ser y no como se supone que deberíamos ser. Cuanto más separadas estén la vida que tienes y la vida que en realidad te gustaría tener, menos feliz serás.
La felicidad es un viaje. No es un estado permanente. No llega un momento en que todos nuestros problemas se solucionan y somos felices. No existe una meta llamada felicidad.
Al contrario, la vida va cambiando en todo momento. A veces atravesamos momentos tristes, otros tranquilos, otros alegres. Incluso en un mismo día podemos sentir diversas emociones: levantarnos de buen humor, estar estresados al mediodía y enfadados por la noche.
Entonces, ¿qué podemos hacer para ser felices?
El secreto de la felicidad está en disfrutar de cada una de las etapas de la vida. La vida puede ser maravillosa cuando nos abrimos a experimentar todos sus aspectos, incluso los más difíciles y dolorosos.
Para disfrutar de ellos, es necesario centrarse en el aprendizaje. Vivir sin creerse víctima de la situación. Vivir preguntándonos qué podemos aprender de cada experiencia. Cuando nos damos cuenta de que, incluso aquello a lo que llamamos negativo, nos ocurre por algún motivo, podemos trascender el dolor y darle un sentido en nuestra vida.
Entendida de esta forma, la felicidad se convierte en un viaje de continuo aprendizaje acerca de la vida y uno mismo.
La felicidad son esos pequeños momentos que nos hacen explotar de alegría y darnos cuenta de que la vida es realmente fantástica, aunque no siempre nos demos cuenta. Esta sensación no es muy larga en el tiempo, puede durar unos minutos solamente pero es tan agradable que ese espacio pareciera más largo.
Momentos como el escuchar la risa de una niño; disfrutar de la lectura de un buen libro bajo la caricia del sol en una tarde de primavera; el instante en que después de haber trabajado intensamente, logras terminar ese proyecto que con tanta ilusión has hecho y el resultado es mejor del que habías planeado; el reencuentro con esa persona que hacía tanto tiempo que no veía; ese abrazo que alguien te da y que te demuestra mucho más que lo que puedan decir las palabras.
La felicidad es esa sensación de paz interior, de plenitud que sientes incluso cuando no ha pasado nada especial, simplemente has aprendido a estar presente, a gestionar tus miedos, a respetar tu esencia. Y entonces sabes que estás en el camino que debes estar para vivir todo lo que quieres vivir.
¿Quién no quiere ser feliz? ¿Acaso no andas tú buscando la felicidad?
Sin sonar pretenciosa, te diré que yo soy una persona feliz.
No todos los días, no a cada momento, pero sí la mayoría de las veces que estoy despierta.
Tengo una mentalidad enfocada en ser la mejor versión de mi misma y para ello la felicidad juega un papel muy importante en mi vida.
Siento que al tener una actitud orientada en la felicidad los días son más claros, las penas son menos amargas y las situaciones triste son más pasajeras.
Veo la vida de otra manera, los problemas no me agobian y cada mal tiene una solución.
Ahhh que me guste la solución, es otro tema, pero que hay soluciones y el cómo afronte yo esa situación dependerá de mi y no de otras personas, eso hace que siempre vea la vida con optimismo y con una sonrisa, por más mal que estén las cosas, por más que el mundo se desmorone, la actitud que yo tome, marca la diferencia.
Por eso pienso que la felicidad no es algo que se busca fuera, es algo que se tiene dentro, es algo que está en ti y que de ti depende si lo sientes o no lo sientes.
A veces no es fácil sacar la felicidad de tu interior, es normal, no todos los días estamos para tirar cohetes, pero vivir amargado o triste es una actitud que tu eliges.
Por ello mi recomendación es que por más que cueste, por más dura que sea la vida contigo, elige sabiamente y sobre todo elige pensando en ti y en que el pesimismo te hará una persona más gris, más triste, donde todo serán callejones sin salida, mientras que el optimismo te hará una persona alegre que siempre verá soluciones a su paso.
La emoción está en tus manos y el trabajo para dominarla está en ti.
Para mí, las 5 claves de la felicidad son:
1.- Disfrutar del momento presente. Considero que vivir conscientemente, disfrutando del aquí y el ahora, nos ayuda a descubrir esa felicidad que está en las pequeñas cosas, a sentir lo que nos rodea y a agradecer lo que la vida nos ofrece.
2.- Tener relaciones personales de calidad. Amar y sentirme amada es uno de los pilares de mi felicidad. Tener buenas amistades, relacionarme con asertividad y empatía con el resto de personas y tratarnos desde el respeto y la confianza me hace sentir en equilibrio. El amor sin expectativas no puede faltar en la vida de una persona feliz.
3.- Estar bien con uno mismo. Las personas felices se quieren a sí mismas y se sienten en paz interior con ellas. Es importante que te conozcas muy bien, que detectes tus luces y tus oscuridades, y que te perdones y elimines la culpa de tus pensamientos.
4.- Actitud frente a la vida. Nuestra felicidad no puede depender de nuestras circunstancias, sino de la actitud con la que nos enfrentamos a ellas. Eso hace que esté en nuestras manos llevar el timón de nuestra vida. La clave está en hacer el pensamiento positivo y la actitud proactiva un hábito.
5.- Ponerle pasión a todo. Vivir en piloto automático, sin un rumbo concreto y dejando que la vida me lleve no me hace feliz. ¿No es felicidad levantarte por la mañana con ganas y energía, y ponerle pasión a cualquier cosa que hagas o te suceda? Para mí sí. Asegúrate de que todo lo que haces te apasiona, y si no es así, prepara un plan de acción para cambiarlo.
Hay que observar la vida con mucha curiosidad porque la felicidad aparece cuando dejas de buscarla, se encuentra en esas pequeñas cosas que suceden todos los días. Soy feliz por lo que soy y no por lo que tengo por tanto la actitud es clave:
- Tener una mente abierta, flexible y siempre dispuesta a aprender.
- Centrarse en querer lo que uno ya hace en vez de obsesionarse con hacer lo que uno quiere.
- Aceptar que la felicidad es una emoción transitoria que juega a aparecer y desaparecer en el equilibrio imperfecto de la vida
La felicidad es el resultado de ser una persona íntegra y honesta con tus valores, de manera que lo que haces, dices, sientes y piensas en tu vida, sean una misma cosa. Cuando se alcanza este elevado nivel de coherencia interna, lo que surge es una profunda serenidad, paz interior y alegría porque vives tu vida libre y sin ego.
De ese sentir nace una de mis máximas: “Haz aquello que haga que te vayas a dormir en paz contigo mismo cada día”
Para saber si eres feliz, pregúntate si sientes que estás en el lugar y el momento adecuados, viviendo en el momento presente y haciendo lo que tu alma y tu corazón te dictan sin dejar que la mente te controle o manipule.
Si tu respuesta es sí, emergerá un profundo sentimiento de gratitud, amor incondicional y dicha reconociéndote un ser divino lleno de fuerza y poder interior.
Por último, decir que para mí la felicidad es un estado superior de consciencia. Es el resultado de un viaje interior en el cual se sanan heridas y se integran aprendizajes. Si no hay desarrollo personal, gestión emocional y sabiduría… ¡ser feliz es mucho más difícil!
¡La felicidad se encuentra yendo a las capas más profundas de tu Ser!
Lo que para mí es felicidad puede que no lo sea para ti. La felicidad es tan subjetiva como lo es la belleza, tal vez por ello sea un tema en el que muchos no concuerden pero hacia el que todos quieren llegar.
Soy tan feliz frente al mar llenando mis pies de arena, dejando que la brisa marina despeine mi cabello, pero también soy tan feliz sin tanta humedad, en una noche fría de invierno debajo de mi caliente manta.
Soy feliz cuando leo, pero soy aun más feliz cuando escribo. Soy feliz cuando camino, pero soy aun más feliz cuando manejo.
Esta felicidad de ahora no se parece en nada a esa felicidad que esperaba hace diez años, que relativa se vuelve la placidez al pasar de los años, antes la confundía con alegría, y ahora es una felicidad más apaciguada, más tranquila, ya no busca aprobación sino busca sosiego interno que se parece más a la paz y al bienestar.
Plenitud y consciencia, en eso se ha convertido mi felicidad de ahora, es un estar tranquila conmigo misma sin esperar de afuera lo que está a caudales adentro, esta felicidad se parece a la calma y a un alivio del alma.
La felicidad, tal y como la mayoría de personas interpreta ese concepto, para mí no existe. Alcanzar un estado casi perpetuo de bienestar es imposible por el ser humano, ya que tendemos a acostumbrarnos demasiado rápido a lo bueno (y a lo malo).
Podríamos ser felices durante una temporada, pero rápidamente volveríamos a sentirnos insatisfechos. Prueba de ello son los estudios que demuestran que algo tan ansiado como ganar la lotería, a largo plazo no supone ningún aumento de la felicidad.
Creo que me cuesta menos definir lo que es la infelicidad: la sensación de que uno tiene muchas opciones y está escogiendo la incorrecta. Eso es lo que hace que la gente se sienta perdida y sin rumbo por la vida. Porque cuando sólo tienes una única opción no piensas si eres feliz o no. Simplemente sigues adelante.
Prefiero creer en los momentos de gran alegría y en la seguridad que nos proporciona una buena autoestima. Eso es lo que de una forma u otra nos ayuda a sentir que, pase lo que pase, tenemos el control de nuestra vida.
Por otro lado, también se ha demostrado que si algo nos puede proporcionar un estado cercano a la felicidad, eso es la calidad de nuestras relaciones sociales. Para más información al respecto te invito a que leas este artículo.
Hay muchas definiciones de Felicidad: desde un estado fortuito, circunstancial y efímero, hasta un estado interno, permanente en el tiempo y que no depende de circunstancias externas, sino que tiene más que ver con nuestra actitud y motivación.
Yo, personalmente, me inclino más por esta última definición. Para mí sería un estado de armonía interna que se manifiesta como un sentimiento de bienestar que perdura en el tiempo.
La mayoría de las personas creen que si cambian sus circunstancias externas serán más felices (más dinero, una relación, tener un hijo, comprar una casa, tener otro trabajo…), cuando, en realidad, esas cosas solo dan una felicidad momentánea que después desaparece.
¿DE QUÉ DEPENDE NUESTRAFELICIDAD? * En un 50% de nuestra personalidad y herencia genética (ese sería nuestro nivel base de felicidad) * En un 10% de nuestras circunstancias externas * Pero, un amplísimo 40% depende de nosotros mismos y se puede trabajar para conseguir aumentarlo
Cosas como darle un sentido a nuestra vida, resolver nuestros problemas, fortalecer nuestras relaciones sociales, realizar acciones altruistas, cuidarnos más… pueden fortalecer y mucho nuestra felicidad.
No es lo mismo estar feliz que SER feliz. Si quieres saber cómo puedes ser más feliz, tengo un regalo para ti AQUÍ
Hace tiempo no terminaba de saber qué es lo que quiero, hasta dónde estoy dispuesta a llegar, qué estoy dispuesta a hacer para llegar a lo que me he propuesto. En última instancia, lo que quiero (me atrevo a decir lo que queremos todos) es ser felices. Hasta ahí es donde quiero llegar, hasta mi felicidad.
Nuestra vida tiene que estar acorde con nuestra felicidad. Pero, ¿qué significa ser felices? Felicidad es muy abstracto.
Bajo mi punto de vista tenemos que determinar qué hay nuestra vida que nos indicará que somos felices. ¿Qué hay en tu vida que te aporta felicidad? ¿Es prestigio, dinero, salud, tiempo libre, amor? Para algunas personas será salud y tiempo libre. Teniendo salud y tiempo, sentirán felicidad.
Otro punto importante son tus valores. Conocer nuestros valores, qué es realmente importante, qué merece la pena vivir, yo creo que es otra parte de la felicidad.
No hay respuestas acertadas ni erróneas. A veces nos sentimos “sucios” porque deseamos algo ambicioso o demasiado grande (por ejemplo, poder y prestigio). Se trata de ser fiel a nosotros mismos y actuar, pensar y vivir en consonancia con nuestros verdaderos deseos.
Creo que lo importante es concretar y saber qué nos hace felices, y tratar de actuar de acuerdo a ello.
La felicidad para mi son muchas pequeñas cosas, detalles, momentos que siento que son únicos e irrepetibles y que hacen de un día algo inolvidable, como por ejemplo un desayuno con tranquilidad junto a mi pareja, disfrutar de los rayos del sol que te calientan la cara en pleno invierno o de un buen helado en verano, un paseo en plena naturaleza lejos del ruido de la ciudad, una cena con amigos que dura horas y horas entre risas y conversaciones inacabables, un día de playa,....y tantos y tantos pequeños instantes que parecen sencillos pero que para mi no lo son.
No creo que la felicidad sea algo grande que tengas que estar esperando a que te suceda, aunque también te puede suceder algo maravilloso, sino que más bien tiene que ver con tener la capacidad de valorar y disfrutar de las pequeñas cosas e instantes que hacen que la vida valga la pena. Si, quizás son instantes o cosas pequeñas pero son los que marcan la diferencia.
Felicidad es la palabra más prostituida de la historia.
. ¿Por qué? Para mí, la fórmula es sencilla: Felicidad = Bienestar + Paz interior.Sin embargo, vivimos en un sistema económico que se sostiene por la deuda que lo respalda:
- Los bancos centrales (Reserva Federal, Banco Central Europeo, etc.) imprimen a diario de la nada cantidades astronómicas de billetes que prestan a los bancos comerciales al 1% de interés.
- Los bancos comerciales prestan ese dinero a países, empresas y personas como tú y yo con interés del 5%.
- Todos sufrimos un bombardeo constante de estímulos orientados a la compra (y venta) de productos y servicios que no necesitamos.
De todas formas mi propuesta no es salir del sistema, si no consumir de forma consciente productos y servicios que te hagan sentir bien y que aporten valor a tu vida y a la vida de los demás.
Por lo tanto, para mí la felicidad no está relacionada con posesiones o experiencias, si no con tu estado de conciencia.
¿Seguirás "comprando felicidad" o serás feliz de verdad?
Espero que estás 23 definiciones te hayan ayudado a reflexionar y sobre todo que dejes de obsesionarte tanto con ser feliz y comiences a preocuparte por cosas más importantes como disfrutar de los pequeños detalles que la vida te regala, ser fiel a tus valores o darle una coherencia y un sentido a tu vida.
Y para ti ¿Qué es la felicidad?
¡Te espero en los comentarios!
Hola,
(Tienes el de Inma repetido).
Y bueno, la verdad es que poco queda que decir, entre unos y otros dan muy buenas pistas de lo que és la felicidad.
Me quedo con que hay muchas formas de interpretarla y vivirla, desde unas sensaciones más afímeras, hasta un estado físico, mental y espiritual más o menos permanente.Todo depende lo que seamos capaces de intervenir en las decisiones y circunstancias que lo hacen posible.
No tiene ningun secreto, aunque se puede llegar a estar muy lejos de experimentarla por desgracia para algunos.
Un saludo!
¡Hola Kiko! Gracias por tu aportación. Efectivamente, hay tantas formas de vivirla como personas en la tierra. Personalmente no creo que exista una definición exacta 🙂
¡Fallo corregido!
¡Un abrazo!
¡Hola, Míriam!
Mil gracias por haberme invitado a participar en este post tan completo y tan enriquecedor.
Ha sido muy bonito para mí encontrarme con tantos colegas que no conocía, pero, cuyo punto de vista me ha encantado y me ha tocado muy profundamente.
Es maravilloso cómo cada uno de nosotros interpretamos y damos sentido de diferente manera a eso, a veces tan complicado, de ser felices. Sin embargo, veo que prácticamente todos coincidimos en que, posiblemente, esté más cerca en las cosas pequeñas de la vida y en los pequeños detalles del día a día.
Quizás el “error” sea que la buscamos demasiado “fuera”, cuando, en realidad, está más cerca “dentro”, aunque nos cueste tanto darnos cuenta. Gracias a todos por hacernos caer en ello.
¡Un abrazo enorme para todos!
Muchas gracias a ti por tu aportación Ana ^^
Estoy de acuerdo contigo, aunque cada persona aporta una definición única de felicidad hay cosas que se repiten como el hecho de que se encuentra en las pequeñas grandes cosas y momentos.
¡Un fuerte abrazo!
Hola Miriam,
Enhorabuena por haber reunido conocimiento tan valioso en un mismo artículo. ¡Qué enriquecedor ha resultado leer todas las aportaciones!
Cada uno tiene su propia visión pero parece que todos estamos de acuerdo en lo mismo: la felicidad no es lo que nos venden, si no algo subjetivo que se debe experimentar.
Un abrazo y gracias por permitirme formar parte del post 🙂
¡Gracias a ti por colaborar!
Estoy muy de acuerdo contigo en eso, tratan de vendernos que seremos más felices si somos más ricos, más guapos, tenemos un alto cargo en el trabajo, etc, etc.. y sobra decir que no es más que una sarta de mentrias enormes regida por intereses económicos.
De hecho la felicidad está bastante al margen de todas esas hisotrias 🙂
¡Un fuerte abrazo!
Hola Miriam!
Qué grandísimo post has hecho realidad, amiga.
Todas las aportaciones son muy enriquecedoras e invitan a la reflexión, además de demostrar, como dice Edu, que la felicidad realmente es algo más que lo que nos intentan vender.
Todo un placer haber compartido esta experiencia y seguir inspirándome con las aportaciones de los compañeros. Muchas gracias por la oportunidad!
Un fuerte abrazo!
Ali
¡Muchas gracias a ti por participar! 🙂
Ha sido un placer para mi leer todas vuestras reflexiones e intentos de definir algo tan complejo y a la vez tan simple como la felicidad.
Un fuerte abrazo
¡Uau! Enhorabuena Miriam, pedazo de post. Conforme terminaba una definición, estaba impaciente por ver quien era el siguiente invitado 🙂
Para mi, el término felicidad se reduce a valorar, disfrutar y sentirte orgulloso de lo que haces cada día con un objetivo final en mente, ser tú mismo.
Como bien señalan Odina o Isa, para mí, la felicidad está en el proceso, en los pequeños detalles, en esa caña tras un día entero de trabajo, esas risas con las personas que te quieren, todo aquello que acabas echando de menos cuando no lo tienes.
Un saludo, y mi enhorabuena de nuevo 🙂
¡Muchas gracias Jesús! jjajaja la verdad que engancha a mi me pasaba lo mismo según me las enviaban.
Y enhorabuena por tu blog que lo acabo de descubrir a raiz del comentario, tiene muy buena pinta, si te puedo ayudar con cualquier cosa no dudes en escribirme 🙂
¡Un abrazo!
¡Fantástico compendio de vivencias para compartir! Para mi la felicidad es algo tan sencillo -y a veces tan lejano- como estar en paz conmigo mismo, vivir en armonía con lo que existe y sucede a mi alrededor, como si estuviera permanentemente en el ojo del huracán, viendo cómo todo vuela sin control a mi alrededor mientras yo permanezco en el centro, tranquilo y confiando en lo mejor.
Un saludo y felicidades por tu magnífico trabajo Miriam,
¡Muchas gracias por tu aportación Manuel! Me ha gustado la metáfora de estar en el ojo del huracán 🙂
¡Un abrazo!
Hola Miriam:
Gracias por la publicación. Me gusta leer tantas definiciones de felicidad. Es valioso y necesario transmitir más mensajes como estos a la sociedad. Buen trabajo Miriam y éxitos.
Por cierto, el enlace a mi blog, no es correcto. ¿Lo puedes arreglar? Gracias mil.
Que tengas una buena semana, Euri
Gracias a ti por formar parte de ello ^^
¡Corregido! Disculpa por los errores.
¡Un abrazo!
Hola Miriam!
Madre mia que genialidad de post, me ha enganchado de principio a final y desde luego es tremendamente enriquecedor ver como cada uno tenemos una visión particular de esta palabra y en cierto modo cada definición habla de nosotros.
Gracias por invitarme a participar, me ha encantado.
Ahora me la has liado bien Miriam, porque te confieso que hay algunos de tus invitados a los que no conocia así que ahora tengo que cotillear sus blogs porque seguro que son geniales jeje. Así que ya tengo trabajo para unos dias jeje.
Un saludo y enhorabuena
P.d: acabo de darme cuenta que mi enlace no funciona jeje. Porfis lo revisas?
Un abrazon enorme
Perdona por el fallo ¡Solucionado!
Gracias a tu por participar y por aportar tu visión 🙂
jajaj espero que el trabajo de estos días te sea productivo.
¡Un fuerte abrazo!
¡¡Pero qué grandísimos profesionales!! Y qué consejos dais 😀
Estoy de acuerdísimo con vosotros. La felicidad es tan necesaria para vivir una vida plena… no hay que perderla de vista ni un segundo 🙂
Abrazos a todos y enhorabuena Miriam 😀
¡Muchas gracias Ana por tu aportación en este artículo!
Entre todos hemos conseguido una buena dosis de consejos muy interesantes 🙂
¡Un abrazo!
¡Gran post Miriam!
Me ha encantado leer cada una de las respuestas. Qué enriquecedor.
Gracias por dejarme participar en él y gracias a cada persona que aportó su granito de arena.
He disfrutado mucho al leerlo y ha sido un gustazo ver caras conocidas tras las respuestas y también conocer a otras personas con proyectos muy interesantes.
Quizá parecen respuestas muy diferentes en la forma pero no lo son en el fondo 😉
¡Abrazo!
¡Gracias a ti Begoña! Estoy de acuerdo contigo, si nos ponemos a analizarlas al fin y al cabo las diferentes definiciones tienen mas cosas en común que diferentes 🙂
¡Un abrazo!
Hermosas definiciones de felicidad has recopilado en este maravilloso post Miriam, todas tan similares, todas tan distintas, me alegra haber sido parte de este grupo de blogueros donde hablamos de un tema tan importante y el cual todos en el planeta queremos alcanzar.
Gracias por la invitación y por dejar que mis palabras se plasmaran en tu blog.
Un gran y sincero abrazo.
Yo también estoy encantada de que hayas formado parte de este post 🙂
Han salido un montón de reflexiones interesantes.
¡Un fuerte abrazo!
Miriam que post tan bueno te ha quedado. Muchas gracias por dejarme participar en él, ha sido un placer poder formar parte de este post y de un grupo de blogueros tan interesante
Me ha encantado leer todos las definiciones de felicidad que hay en este post
Un abrazo bien fuerte
¡Gracias a ti Odina! Un placer tener a profesionales como tú aportando su granito de arena para hacer posible este post.
Un abrazo.
Hola, Miriam, Excelente post, te felicito por esta iniciativa, definitivamente esta es la forma de demostrarle a nuestra sociedad 23 maneras de ser feliz y ninguna tiene que ver con dinero, Saludos y Éxitos!
Gracias David ^^
Y enhorabuena por tu proyecto no lo conocía pero tiene una pinta estupenda.
Un abrazo
Me ha encantado cómo ha quedado el post. Pensé que ya lo había comentado y mira que no es así :/
Creo que la felicidad para todos es muy parecida, la vemos en pequeñas cosas, la apreciamos porque la conocemos, la vivimos y la disfrutamos. No es fácil llegar al punto de sentir tal felicidad que el mundo esté completo, pero es un camino que merece la pena y es muy posible 🙂
¡Hola Diana!
Completamente de acuerdo contigo 🙂
Un abrazo fuerte
La felicidad, concebida como un estado de alegría permanente, es posible. Esta afirmación esta fundada en una experiencia que tuve la suerte de vivir y que a continuación refiero: en un momento determinado de mi vida decidí abandonar la carrera de estudios que estaba cursando, me encontraba entonces sin hacer absolutamente nada, en un estado de ocio ininterrumpido, transcurrido un tiempo comencé a sentir una sensación de alegría, la cual iba in crescendo hasta convertirse en algo continuo, y acompañando a ello una disminución de la inhibición, que por cierto era importante, hasta perderla completamente. Al cabo de un tiempo decidí retomar mis estudios, lo que me valió volver a mi estado “normal”. No estoy seguro de todas las personas que alcanzaran un estado de ocio ininterrumpido necesariamente pudieran experimentar ese inefable sentimiento. Intuyo que hay un elemento más, y entiendo que este sería el de un distanciamiento de las cosas en general, que es una característica de mi personalidad.
Pienso que la felicidad está en ser uno mismo y vivir la vida, disfrutando de los pequeños momentos que se presentan día a día en forma de paz y sosiego, cada momento con sus respectivas experiencias, pero que en realidad, es cuestión, de ser, estar, aquí y ahora y hacer lo que creemos correcto en cada momento del instante presente, aprovechando las oportunidades y aprendiendo de este camino llamado vida. 🙂
La felicidad es como creer en un Dios. Todo el mundo ansia tenerla , pero al final quien menos piensa en ella, es quien más feliz es!!
La felicidad es disfrutar lo que hago, estar bien con las personas que están a nuestro alrededor. En fin vivir cada segundo que pasa al máximo. Y nunca olvidarnos de que la felicidad no está en el dinero si no es fuerza interior.
En mi modo de pensar la felicidad empieza desde que nacimos y aunque uno muera la felicidad se queda ya que es parte de nuestro pensar y nuestro sentir, totalmente todo lo que nos rodea nos hace feliz, las experiencias que uno como persona pasa tienden por ser ya que en un presente nos ayuda a reflexionar a seguir viviviendo para ver la importancia de la vida y descubrir ese sentimiento que nos hace feliz.
Para mí la felicidad es un estado que cuesta. Comprender. Una vez que se comprenda serás feliz
Puede ser difícil. O fácil
Empieza todo este camino con el perdón hacia ti mismo. De los daños producidos a tu insconsciente. Y luego empieza a perdonar a los demás. Por qué todos tenemos los mismos problemas. Las mismas emociones. Los mismos pensamientos. Las mismas alegrías. Hasta el panadero ese que pasa que no siquiera te fijas. Hasta
El que más odio te impera
Perdona. Perdona y suelta.ese es el camino.
Y sus sendas. Te llevarán a construir tu mundo al lado de lo más sonriente. El amor.y los seres sonrientes sonrientes.
Querrán amarte y estar a tu lado por siempre.con amor.compartiendo tu felicidad.
Sería interesante tener la opinión de científicos, escritores, filósofos, políticos destacados,
Aveces me siento muy pequeña en este mundo y nunca pude comprender que era la felizidadnunca alguien me hizo sentir bien e importante yo tengo un buen autoestima pero mis hermanos me hacen la vida imposible con comentarios groseros y quería leer si lo que sentía era felizidadnunca almenos por seguir viva obsoletas es una simple sonrisa falsa que resplandece en mi rostro.
Hola Miriam!!
Me encantan estos espacios para expresarte. Para mi la felicidad es vivir en una plenitud tanto mental como físicamente (salud y bienestar), estar tranquilo contigo mismo y sobre todo quererte y aceptarte tal como eres. Cuando entiendas todo eso podrás encontrar tu felicidad, digo esto porque mucho tiempo fui infeliz, pero no lo sabía. Espero que haya aportado algo.
Muchos saludos y un fuerte abrazo.
Yo creo en la felicidad es un estado al que llegamos cuando somos coherentes con los que pensamos, decimos y hacemos, mientras somos agradecido y conscientes por todo eso.
Si conseguimos no ser infélices ya bastante es.
Ser feliz es una meta a la que todos queremos llegar, pero tenemos diferentes ideas sobre cómo conseguirla. Es fácil pensar en la felicidad como un resultado, pero aprender a sentirnos bien a pesar de las circunstancias es clave para mantener un estilo de vida saludable.
Es verdad que a veces las circunstancias pueden no ser las más favorables para sentirte bien, sin embargo hay ciertas acciones que sí podemos poner en práctica para mejoran nuestra actitud ante la vida.
me encanto
Contentamiento,alegria, felicidad. Conozco la felicidad y puedo asegurar que; no tiene nada que ver con lo exterior. es interna ,es algo que quieres explicar pero no hay palabras,
solo puedo decir que la felicidad no es egoísta no odia no guarda rencor no critica es extremadamente generosa etc etc etc.la he sentido como un destello, en cualquier momento, en cualquier situación y puedo decir que no se parece a nada de este mundo nada que tenga precio
El ser feliz consta de vivir sin arrepentimientos, sabiendo que tus acciones te satisfacen y te permiten desarrollarte y crecer como persona.
En lo personal uno puede ser feliz hasta por la más diminuta cosa y creo que lo más importante es poder obtener felicidad hasta de lo más improbable o más irónico, por ejemplo, a mi me hace feliz poder tomarme un café dulce antes de irme a la escuela o escuchar mi música preferida e incluso cantarla a pesar de que soy tan afinado como el graznido de un pato, pero el punto es que de las acciones más comunes puedo identificar que las mismas realmente me hacen sentir completo, por lo tanto soy feliz.
Creo que necesitaba decirlo y espero le sirva a alguien 😉